Se conforma de 3 componentes básicos: la caldera, los zoclos térmicos y el termostato. La caldera calienta el agua y por medio de una bomba la envía hacia los zoclos. Estos reciben el agua caliente, absorben el calor del agua y lo liberan al ambiente y de esta forma se establece la circulación de calor.
El agua ya tibia regresa a la caldera y el proceso se vuelve a repetir hasta que se alcanza la temperatura deseada dentro de la habitación, la cual la indicamos en el termostato. El termostato continuamente monitorea la temperatura ambiente y manda encender o apagar el equipo según se requiera, de forma totalmente automática.